LA TEMPESTAD-Maria Eugenia

LA TEMPESTAD GIORGIONE

La obra se titula “La Tempestad”. Es un óleo sobre lienzo de 82x73 cm. Se realizo entre 1506 y 1508

y actualmente se encuentra en la Galería de la Academia de Venecia. Pertenece al periodo del Cinquecento del Renacimiento Italiano aunque sigue guardando muchas características del Quattrocento. El autor de la obra es Giorgio Barbelli da Castelfranco pero más conocido como Giorgione. Fue alumno de Giovanni Bellini. Fue uno de los mayores representantes de la escuela Veneciana, que fue una escuela donde se desarrollaron y mejoraron estilos pictóricos mas importantes de este periodo y que más tarde se expandirían por toda Europa. En la Escuela se investigo sobre la cualidad, diversidad y propiedad de los colores. De ella salieron importantes pintores como su maestro Giovanni Belini, Vittore Carpaccio o Tintoretto. Aunque gozaba de gran fama entre sus contemporáneos. Se sabe muy poco de su vida, ya que murió muy joven. Giorgione inicio la apertura hacia nuevos campos temáticos  como la mitología, la fábula, la historia… Al morir dejo muchas obras sin finalizar o incompletas de las cuales algunas las terminaría su aprendiz Tiziano.  Entre sus obras más destacadas aparte de “La Tempestad” están la “Venus dormida”, en la que se representan a una joven dormida que forma parte de la naturaleza que la rodea, y “El concierto Campestre” a la que recientemente se la ha atribuido a Tiziano.

Esta obra es una imagen figurativa ya que intenta representar la realidad. Podemos observar en la imagen que a la derecha, a orillas de un río, protegida por árboles y restos ruinosos hay una mujer semidesnuda que amamanta a su hijo mientras que a la izquierda un joven permanece de pie y se apoya sobre su vara. Más al fondo, tras un puente se aprecia la oscuridad en las aguas próximas y una ciudad a lo lejos  bajo un cielo amenazador de nubarrones que muestran un rayo. También hay dos árboles pintados en cada margen del lienzo en las que se percibe movimiento por las corrientes de viento que se originan en las tormentas. Aquí la naturaleza se convierte en la verdadera protagonista ya que a lo que todo lo demás se transforman en simples elementos ya que Giorgione se caracterizaba por ser uno de los primeros artistas en dar a la naturaleza mayor o casi la misma importancia que las representaciones de seres humanos.

La tempestad es un óleo sobre lienzo de tamaño mediano. El cuadro presenta una variedad de 

colores muy amplia en las que predominan tonos marrones, ocres y verdosos, estando entre los tonos más cálidos los rojos como por ejemplo de la ropa del hombre y tonos mas fríos como el manto blanco en el que se sienta la mujer, la camisa del hombre o las columnas de mármol derruidas. También aparecen unos contrastes de claroscuro, como se puede apreciar en el rostro del hombre o los pliegues de los ropajes de ambos que aparecen prácticamente en penumbra, esto crea una sensación de volumen.

En general su pintura es delicadísima y consigue darle un aspecto misterioso e intimo sin

necesidad de una perspectiva lineal y utilizando la técnica del esfumato para resaltar más la imagen mas cercana al cuadro y dándole a las mas lejanas un efecto de difuminación y misterio.

  

Sobre su interpretación hay varias teorías. La mayoría son literarias como la que dice que este cuadro representa la leyenda de Paris, en el momento que deja a su hijo heredero en manos de dos campesinos para que al crecer no matase a su padre que era el rey. Otra teoría, basada en la historia de Adán y Eva en la que Eva le esta dando el pecho a Caín.

En conclusión, a Giorgione se le considera  el padre de las bases para el desarrollo del arte moderno. En sus obras prescinde de los elementos geométricos y se apoya en los agentes atmosféricos y ambientales. Fue una gran inspiración para artistas posteriores como su aprendiz Tizziano o como para Édouard de Manet con su obra “Almuerzo sobre la hierba” en el que se puede ver similitudes como la contraposición de los hombres vestidos frente a la mujer desnuda. También tiene grandes similitudes con el cuadro de “Concierto Campestre” que se le atribuyo recientemente a Tizziano.

Como curiosidad cabe destacar que las radiografías realizadas a “La tempestad” permiten comprobar que en un principio que Giorgione no había pensado pintar a la madre con su hijo y que en lugar del joven había pintado una muchacha desnuda con los pies en el río, el pintor demuestra con esto que no había partido de una idea cerrada, sino que ésta se fue concretando a medida que avanzaba en la obra.